Quiero compartir este artículo, no porque yo sea una experta orando o rezando, al contrario, algunas veces no sé cómo hacerlo y tengo mucho que aprender. Lo único que sé es que orar, conversar con Dios, no requiere de mucho tiempo, solo de un corazón sincero y dispuesto, y lo puedes hacer en cualquier momento.  Sin embargo, hacerlo temprano todas las mañanas cambiará por completo tu día y el de los demás para bien, pues  estar en silencio sintiendo su presencia, llenará nuestra mente y alma de paz.

Lo que comparto a continuación son los consejos y oraciones del Padre Sergio de un video que vi en YouTube, y a mí me ha ayudado a mejorar y a crear un hábito de oración y agradecimiento diario.

1. Busca un tiempo a solas.

La oración de la mañana debe ser nuestro primer pensamiento al despertar de manera que se convierta en un hábito, debemos hacerla con todo nuestro ser, entregando a Dios cada paso, acción o movimiento que realizaremos en el día. Podemos poner una alarma, establecer una hora y esforzarnos por cumplirlo, debe ser un tiempo a solas con Dios y sin prisas.

2. Agradece, ora.

Empieza dando gracias a Dios por regalarte un día más. Toma conciencia de todo lo que te ha dado, tu familia, trabajo, salud, hogar,  y verás lo bendecido que eres. Al vivir con una conciencia de agradecimiento nos llenamos de alegría, nos enfocamos en nuestras propias vidas, y disfrutamos todo lo que tenemos, sea poco o mucho; no tendremos tiempo de quejarnos o pensar en aquello que pensamos nos hace falta. Una vez que estamos consciente de nuestras bendiciones es tiempo de adorar a Dios.

“Gracias padre santo, te adoro con todo mi ser, te adoro porque eres bueno conmigo, te adoro porque me perdonas todas mis faltas, te adoro porque me amas, pero sobre todo te adoro porque eres mi Dios”

3. Toma conciencia del tiempo presente.

Concéntrate en lo que vas vivir en este tiempo presente, hoy, nuestro Jesús no tiene memoria, se olvida de tus faltas. Ponte en sus brazos, deja el pasado, vive hoy. No pienses tato en tu futuro, solo ponlo en manos de Dios.

“Señor ayúdame a ser consciente que lo único que tengo es el día de hoy, por lo tanto, ayúdame a ser feliz, ayúdame a hacer todo para gloria tuya, permíteme que todos mis pensamientos sean de agradecimiento y de fortaleza, enfocados en este día, ayúdame olvidar todo lo que me hace sufrir de mi vida pasada y quítame las preocupaciones del tiempo futuro, quiero descansar en ti, quiero que contigo nos dediquemos a trabajar en este día”

4. Prevenirnos de la tentación.

Pregúntate a donde irás este día, con qué personas te encontrarás, aléjate de las tentaciones donde puedas caer y exponerte a personas y situaciones negativas.  Pide fortaleza para decir no a todo aquello que no sea para tu bien, y el señor te la dará.

5. Refúgiate en los brazos de Jesucristo.

Vive con la esperanza y confianza en nuestro señor, pide la gracia de refugiarte en sus brazos. No te angusties, confía en Dios. No temas, el Espíritu Santo te dará  la paz para enfrentar lo que sea, así que tranquilo, cuida de ti y tu familia y de cada paso que dan.

“Estoy en tus brazos, me abandono en ti, confió en que todo saldrá bien”

Con estos 5 pasos puedes orar y agradecer por la mañana en solo 5 minutos,  y verás como cambiará tu día. Saldrás contento y con una sonrisa de tu casa, y solo sabrás dar alegría a todo aquel que se te cruce en el camino porque Dios va a tu lado.

“No es lo mismo caminar solo que caminar de la mano de Dios”

También puedes  hacer tus propias oraciones con las palabras que salgan de tu corazón, y sin tiempo, lo importante es que lo hagas con sinceridad desde lo profundo de tu ser.

“La vida de la mano de Dios es fantástica”

Minnie